Ambiente muy acogedor, con un jardín ideal para relajarse. Atención de los anfitriones de 10, siempre pendientes de que no faltara nada. Sin embargo, un poco de ruido durante la noche y algunos malentendidos con el menú.

La atención de Kiko fue excepcional y muy amable.

Tuve una mala experiencia con el desayuno, ya que el dueño solo lo servía a partir de las nueve y media de la mañana. A las nueve y cuarto, tuvimos que dejar la habitación en ayunas. Además, tuvimos un malentendido con la cena, ya que me habían dicho que podría cenar, pero al llegar me indicaron que ya no servían a los peregrinos. Esto fue frustrante, ya que llegué puntualmente.

La comida fue deliciosa, especialmente el cocido, y el ambiente era acogedor, lo que hizo la experiencia muy agradable. Sin embargo, el servicio fue un poco confuso. hubo una espera prolongada y algunos malentendidos en el menú. Aunque la atención del personal fue amable, hay aspectos que podrían mejorar.

Todo increíble! Jardín acogedor, comida deliciosa, atención excepcional.

la habitación era muy cómoda y amplia. el wifi necesitaba un poco de tiempo para conectarse.

la habitación era un poco ruidosa durante la noche. pero la comida era deliciosa, con un cocido maragato increíble. el ambiente era súper acogedor y el dueño fue muy atento y amable. el baño estaba muy bien equipado y limpio.

Nuestra estadía fue agradable, las habitaciones eran cómodas y limpias, y teníamos acceso a internet, lo cual fue genial para conectar con el mundo mientras estábamos de vacaciones. A mi prometido y a mí nos encantó el jardín, ideal para que los niños jugaran.

Mi mujer dice que sería genial tener más opciones para los niños en el menú. Aunque había un ambiente acogedor, siento que podrían mejorar en la parte de la comida.

Ideal para familias y amigos

La comida fue increíble, especialmente el cocido que nos sirvieron, realmente parecía hecho con amor. me encantó que Kiko, el dueño, siempre estuvo pendiente de nosotros, haciendo que el ambiente fuera súper acogedor.

El precio no era barato, pero era aceptable dado lo que ofrecieron.

La habitación es muy espaciosa y limpia, con colchones cómodos y una decoración colorida que crea un ambiente agradable. La atención de Kiko fue excepcional, siempre dispuesto a ayudar y asegurándose de que todo estuviera en orden. Sin embargo, la situación con el servicio fue un poco confusa, ya que hubo momentos de espera prolongada y una falta de comunicación en el menú, lo que afectó la experiencia. En cuanto a la ubicación, es tranquila, pero la accesibilidad puede ser un desafío.

La ubicación de la Hostería Casa Flor es excelente, muy cerca de Astorga. La habitación era amplia y estaba limpia, con un ambiente agradable. Kiko, el encargado, fue muy atento y servicial, lo que hizo nuestra estancia mucho mejor. Sin duda, es un lugar que podría recomendar por su simplicidad y amabilidad.

recomendado

El Wi-Fi era rápido. La comida buena, aunque el lugar es un poco ruidoso.

Una experiencia inolvidable

El servicio fue excepcional, muy atentos a nuestras necesidades. El ambiente relajante del jardín y la limpieza de la habitación superaron nuestras expectativas. Recomiendo a los futuros huéspedes disfrutar de una cena en la zona, ¡hay opciones deliciosas en los alrededores!

El lugar es acogedor, con un jardín perfecto para relajarse y disfrutar del aire fresco. La presión del agua en la ducha fue excepcional, y el personal muy atento, siempre dispuesto a ayudar.

Hubo un malentendido al momento de cenar y se me informó que no se podía, lo cual fue frustrante.

La experiencia gastronómica fue increíble! En el pueblo cercano, probamos un café con un pincho de tortilla que te deja sin palabras por solo 4,5 €. ¡una joya! La habitación era muy amplia y la presión del agua en el baño excelente. Kiko, el encargado, siempre estaba ahí, asegurándose de que todo estuviera en orden, lo que creó un ambiente hogareño.

Aunque el bar restaurante estaba cerrado, lo entendí por la época del año. Un pequeño lío al querer cenar, pero el trato amable del personal lo compensó. Sin duda, no restó brillo a la estancia.